Tengo 40 años en Marina Grande. Allí he pasado espectaculares momentos de mi vida. Fue donde crecieron mis hijos con vida saludable. Tanto mi esposa como yo hicimos sólidas amistades que han perdurado hasta hoy. El ambiente es totalmente afable, el paisajismo es precioso e invita al sosiego, la comida siempre cae bien, el personal es amable y atento por naturaleza; como buenos guaireños. El área de la playa es una de las mejores del litoral. Como jugador de tenis afirmo que pocos clubes tienen unas canchas en tan buenas condiciones. Todo esto a pocos minutos de Caracas. No se puede pedir más. ¡Me encanta Marina Grande! No la cambio, lo testimonio.

Prácticamente nací en el club Marina Grande. Voy desde que era un bebé, pasé mi infancia y adolescencia completa con muchos amigos; siempre rodeado de naturaleza y de la playa del club. Disfruté las piscinas además de todos sus espacios recreativos. Ahora de adulto, el club es un espacio que visito con frecuencia con mis hijas, ellas también se divierten y yo disfruto de las canchas de tenis y del mar, sinceramente para mi Marina Grande es como mi otro hogar y es parte fundamental de mi vida. Es un lugar que disfrutamos en familia los fines de semana. Siempre cuento los días para volver a sentarme frente al mar a relajarme, saliendo de la rutina disfrutando de la vista acompañada de variadas opciones de comida.

Tengo más de 40 años asistiendo a Marina Grande y me quedo corto con lo que puedo decir, pues acá he pasado y aún paso excelente momentos tanto familiares como con mis amigos. El personal te hace sentir como en casa, prestos a ayudar y siempre con una sonrisa. Así que estar en esta playa no es sólo disfrutar es sentirte seguro y super cómodo.